Por Sebastián Morales, Gerente de Aseguradores de Cauciones Uruguay.
Desde hace tres años expandimos nuestras operaciones y comenzamos una nueva Compañía en Uruguay. En la actualidad, el impacto de la pandemia en la economía uruguaya se vio fuertemente reflejado durante el primer y segundo trimestre del año, y de forma mucho más severa en este último. Comenzamos el 2020 esperando un crecimiento anual del PBI de entre el 2% y 3% y, por el contrario, a partir del contexto actual se proyecta un decrecimiento de al menos 4% para el cierre del año. En términos de inflación se estima cerrar el 2020 en 9,8% y poder volver al 8% recién a mediados del 2021.
Durante el segundo trimestre, los mayores efectos se notaron en actividades como venta de vehículos, exportaciones, gastronomía, comercio y turismo, llevando la tasa de desempleo al 10%. En este sentido, el gobierno tomó una serie de medidas para reducir el impacto que la pandemia está teniendo: flexibilizar el acceso al seguro por desempleo, diferir distintos vencimientos de obligaciones para empresas, crear subsidios para los sectores más vulnerables, generar líneas de crédito para empresas con condiciones de pago blandas y, en términos impositivos, diferir el pago del IVA mínimo para algunas industrias, entre otros.
En contrapartida, algunos sectores sufrieron menos el impacto. Es el caso de la construcción, que sólo sufrió un parate de actividad de tres semanas en abril, pero se mantiene básicamente en movimiento por la obra pública, con un protocolo desarrollado para mantener en movimiento al sector
Así, si bien la economía se encuentra casi frenada, se habla de varios impulsos transitorios que permitirán un repunte más acelerado para Uruguay. El más comentado tiene que ver con el sector de la construcción, que tiene por delante grandes obras hasta 2022 como los proyectos de Participación Público-Privada (PPP) y la construcción de la planta de UPM2 y sus proyectos asociados.
A futuro, el gobierno de Uruguay trabaja sobre algunas medidas para la reactivación económica como flexibilizar los plazos de la ley de inversión para acceder a beneficios fiscales, modificar la normativa para permitir exportar a pequeñas y medianas empresas y modificar plazos de admisiones temporarias con el fin de facilitar y abaratar insumos para la industria.
Por nuestra parte, desde Aseguradores de Cauciones nos mantuvimos operativos desde el inicio de la pandemia: adaptamos el sistema de guardias rotativas para extremar los cuidados y minimizar el riesgo de contagio. Además, reemplazamos las reuniones presenciales con nuestros Corredores por diferentes acciones que nos permitieron mantener la comunicación y el trabajo diario. Actualmente nuestra oficina está abierta al público en horario normal de 9 a 17hs.
Posando la mirada en la vuelta a la actividad, a pesar de que la región se encuentra con ajustes económicos, las condiciones financieras de Uruguay en comparación con Argentina y Brasil son auspiciosas. En este sentido se espera una inyección importante de inversión extranjera como uno de los pilares de la reactivación económica. Sumado a esto se prevé un número importante de subcontratos desde la construcción nacional que requerirán de garantías por parte del mercado de caución y por lo tanto implican una gran oportunidad para nuestro negocio.